lunes, 14 de enero de 2008

El Sutra de los Cuatro Asentamientos de la atención (Satipatthana Sutta)


El Sutra de los Cuatro Asentamientos de la atención (Satipatthana Sutta), uno de los textos mas básicos de meditación budista, enseña que la atención vigilante debe ser practicada a lo largo de todo el dia, en cualquier posición que nos encontremos durante cualquier acción que llevemos a cabo. La practica de la atención vigilante no esta confinada a la posición sentada. El monje practica atención vigilante mientras se coloca su habito, lava su cuenco, camina, esta de pie, se inclina, estira, acarrea agua, corta leña y demás. Basado en esta enseñanza, el budismo comprometido fue practicado por los monjes de Vietnam durante la guerra, en los años sesenta y setenta. Monjes y monjas participaron en tareas de ayuda a refugiados, huérfanos y heridos.En una situación de guerra, un monje no puede limitarse a sentarse en la sala de meditación mientras caen bombas por todas partes. Las bombas también pueden caer en su templo. El corazón de la meditación budista es la atención vigilante, la energía que nos ayuda a saber lo que sucede en el instante presente. Si lo que ocurre en el instante presente es la destrucción de vidas humanas, el monje debe implicarse en las tareas de ayuda y cuidado. Esta es una expresión concreta de compasión.
La cuestión, pues, no es si debe implicarse o no, sino como hacerlo sin renunciar a la vida contemplativa. La enseñanza del Satipatthana Sutta afirma que es posible.¿ Como podemos llevar a cabo una labor de amor sin perder la practica ?Escuchemos a la Madre Teresa: "Las hermanas de nuestra congregación deben andar por las calles, tomar los autobuses al igual que otras personas y entrar en las casas de los pobres. No podemos encerrarnos tras nuestras paredes y esperar a que los pobres vengan a llamar a nuestra puerta .... Somos gente de la calle. Nuestras hermanas caminan por las calles y rezan mientras lo hacen. A veces me explican cuanto tiempo les ha costado llegar a determinado lugar y cuantos rosarios han rezado: tres, cuatro. Caminan con tanta rapidez que en Calcuta las llaman"las hermanas de carrera"". ¡Imaginad que difícil es caminar deprisa y rezar rosarios a la vez! La presión siempre esta ahi. En la tradición budista, existe la practica de la meditación andando.Caminamos porque debemos ir a algún sitio, pero lo hacemos de manera que nos proporcione calma, estabilidad y alegría a cada paso. La cuestión es como estructurar nuestras vidas para que hagamos todo con atención vigilante, sin perder nuestra practica.

Thich Nhat Hanh...

Tibet...


En el Tíbet, las pieles nuevas se ponen al sol y se frotan con mantequilla para hacerlas más suaves. El practicante es como una piel nueva: duro y áspero, con una visión limitada y una rigidez conceptual. La enseñanza (dharma) es como mantequilla que se le frota mediante la práctica, y el sol es la experiencia directa; cuando se aplican ambas, el estudiante se vuelve suave y maleable. Sin embargo, la mantequilla se guarda en bolsas de piel y cuando se deja ahí por muchos años, la piel se vuelve tan dura como la madera y no es posible suavizarla nuevamente, no importa cuanta mantequilla nueva se use. De la misma manera, alguien que pasa muchos años estudiando las enseñanzas, intelectualizándolas y teniendo poca experiencia directa de ellas, es como la piel endurecida. Las enseñanzas pueden suavizar la piel endurecida por el condicionamiento y la ignorancia, pero cuando se guardan en el intelecto y no se frotan en el individuo por medio de la práctica, ni se calientan con el sol de la experiencia directa, puede volverse rígido y duro en su comprensión intelectual. Entonces las nuevas enseñanzas no lo suavizarán, no podrán entrar en él, ni cambiarlo. Debemos tener cuidado de no guardar las enseñanzas como conceptos intelectuales solamente, ya que la comprensión intelectual en si misma se vuelve un impedimento para la sabiduría. Las enseñanzas no son ideas para coleccionar, sino un camino a seguir.