jueves, 16 de agosto de 2007

¡HOMENAJE A LA SAGRADA PERFECCIÓN DE LA SABIDURÍA!.







¡HOMENAJE A LA SAGRADA PERFECCIÓN DE LA SABIDURÍA!Así oí en cierta ocasión. El Señor se encontraba en Rajagrija, en la cima del Pico del Buitre, junto con una gran asamblea de monjes y Bodisatvas. En aquella ocasión, el Señor estaba absorto en la concentración que examina todo fenómeno llamada «apariencia profunda». Al mismo tiempo, el noble Señor Avalokitesvara, el Bodisatva Mahasatva, contemplaba la práctica de la Perfección Profunda de la Sabiduría, aprehendiendo los cinco agregados como vacíos de sí mismos. Entonces, por inspiración de Buda, el Venerable Sariputra, le dijo al Señor Avalokitesvara, el Bodisatva Mahasatva: «¿Cómo debe proceder un hijo de buen linaje, cuando desea adiestrarse en la práctica de la Perfección Profunda de la Sabiduría?». Y el noble Señor Avalokitesvara, el Bodisatva Mahasatva, contestó al Venerable Sariputra de la siguiente forma: «Sariputra, cualquier hijo o hija de noble linaje que desee adiestrarse en la práctica de la Perfección Profunda de la Sabiduría, deberá hacerlo así: Aprehendiendo también los cinco agregados como vacíos de sí mismos. Forma es vacuidad, vacuidad es forma. Vacuidad no es más que forma y forma no es más que vacuidad. Del mismo modo, sensaciones, recogniciones, voliciones y conciencia son vacías. Así pues, Sariputra, todos los fenómenos son vacíos, carecen de características diferenciadoras, ni son producidos ni cesan, ni son impuros ni inmaculados, ni deficientes ni completos. Así pues, Sariputra, en vacuidad no hay forma, ni sensación, ni recognición, ni volición, ni conciencia; no hay ojo, ni oído, ni nariz, ni lengua, ni cuerpo, ni mente; no hay forma visible, ni sonido, ni olor, ni gusto, ni tacto, ni objetos de la mente; no hay elementos visuales hasta no haber elementos mentales, ni elementos de la conciencia mental. No hay ignorancia ni extinción de la ignorancia, hasta no haber envejecimiento ni muerte, ni extinción del envejecimiento ni de la muerte; por tanto, no existe el sufrimiento, ni su causa, ni su cesación, ni camino, ni sabiduría, ni logro, ni ausencia de logro. Por tanto Sariputra, porque no hay logro, los Bodisatvas observan y confían en la Perfección de la Sabiduría, con sus mentes libres del oscurecimiento y temor. Trascienden toda visión errónea y alcanzan el fin, el Nirvana. Todos los Budas de los tres tiempos, al confiar en la Perfección de la Sabiduría despiertan completamente a la suprema y perfecta Iluminación. Por tanto, debe conocerse el mantra del Prajnaparamita como el mantra del gran conocimiento, el mantra supremo, el mantra inigualable, el mantra que calma todo sufrimiento, la Verdad porque carece de error. El mantra del Prajnaparamita es proclamado: ¡TA YA THA GATE GATE PARAGATE PARASAMGATE BODHI SOHA! De este modo, Sariputra deberá un Bodisatva Mahasatva adiestrarse en la Perfección de la Sabiduría». Entonces, el Señor surgió de su concentración y ensalzó al noble Señor Avalokitesvara, el Bodisatva Mahasatva y todos los presentes, incluyendo devas, humanos, asuras y gandarvas, quedaron complacidos y elogiaron las palabras del Señor. ASÍ TERMINA EL ARYA-BHAGAVATI-PRAJNAPARAMITA-.el bodisatva aqui en el mundo fisico de avalokitesvara...
Su Santidad Dalai Lama.